Con una estética cuidada, la imagen del lago de fondo y la interpretación magistral de la Orquesta Sinfónica de Salta, se desarrolló el drama del príncipe Sigfrido y la bella Odette, en una versión adaptada por María Inés Riveros Hidalgo y Sabrina Streiff sobre la base de los autores originales, Marius Petipa y Lev Ivanov.
Más de 50 bailarines pusieron cuerpo, técnica y pasión a la puesta en escena de la historia. Supieron transmitir la alegría de los festejos reales, como así también la belleza y delicadeza de los cisnes y la lucha entre el bien y el mal, el engaño y la verdad, el poder y el amor.
Álvaro Monar y José Chaile se convirtieron en Sigfrido, Sara Sonderegger fue Odette (el cisne blanco) y Natalia Ozuna Odile (el cisne negro). El sábado ambos roles recayeron en Cecilia Esteban. El malvado brujo Von Rothbart fue interpretado por Sebastián Scolari.
“Es una alegría saber que el público de todas las edades acompaña siempre, ahora más que nunca. La gente sigue soñando a través de los artistas y apoya la cultura. Una persona que compra su entrada confía en algo que todavía no ha visto, y es por eso que nos debemos a ellos.
Es un gran un trabajo en equipo con responsabilidad y compromiso”, expresó la directora del Ballet de la Provincia, Inés Riveros Hidalgo e invitó a la próxima puesta en escena "La Sylphide" una historia de pasión y amor no correspondido, que se presentará el 3 y 4 de noviembre en el Teatro Provincial.”
