En la ceremonia de premiación habló, visiblemente emocionada, la directora salteña Lucrecia Martel, este año presidenta del jurado de la Mostra y a quien Almodóvar ha producido varias películas.
Martel aplaudió la concepción "religiosa" que el español tiene de su oficio y su labor en aquellos años en los que España despertaba en los albores de una democracia, tiempos en los que Almodóvar y su generación combatieron "con las mejores armas", las de la cultura.
En tanto, el cineasta español dijo que recibió el honorífico León de Oro del Festival de Venecia, un lauro por el que esperaba hace más de tres décadas y que por ello consideró "un hecho de justicia poética".