Pese al clima de pesimismo y dolor que ya se vive en todo el país, la Armada sigue adelante con la búsqueda del submarino ARA San Juan, desaparecido hace ya ocho días en aguas del Atlántico Sur.
El vocero de la Marina, Enrique Balbi, aclaró este jueves por la tarde una serie de rumores que circularon por los medios, muchos de ellos infundados en base al desconocimiento general sobre la temática de submarinos.
Dijo que hubo un problema eléctrico que fue subsanado antes de zarpar, agregó que el criterio de quienes toman decisiones es no partir ante una sospecha de inconvenientes para no arriesgar a la tripulación ni a la embarcación.
Reiteró que el dato de la explosión se conoció el miércoles mediante la embajada de Austria y desde los Estados Unidos y pidió contención y respeto para los familiares.
Habló de un siniestro, pero dijo que no se dará ninguna hipótesis antes de encontrar al submarino y resaltó la cooperación internacional en la búsqueda que se desarrolla en una zona donde la profundidad va de los 300 metros a los 4.000 metros.
Poco a poco la angustia va dando paso al pesimismo.