El senador nacional e integrante de la Comisión de Presupuesto de la Cámara Alta, Juan Carlos Romero, aseguró: “No creo que la oposición pueda dejar al gobierno sin presupuesto, van a tener que dar el debate". Lo hizo como invitado central del programa Odisea Argentina, que conduce el periodista Carlos Pagni, por La Nación+.
"Hay un tema con las provincias respecto de que tienen una parte asociativa con la solución que el Gobierno pueda dar a la situación económica. Ya pasó en el 2001. Hay sutilezas, por ejemplo, hay provincias que están muy bien y que no les aprieta tanto el zapato”, aseguró Romero. En ese sentido, y de cara al tratamiento en el Congreso del Presupuesto 2019, señaló: “No creo que la oposición pueda dejar al gobierno sin presupuesto, tendrá que dar el debate".
Por otro lado, Romero, quien preside el Interbloque Parlamentario Federal en el Senado nacional, analizó el escenario en miras a las elecciones del 2019. Subrayó: "Hoy está Macri y está Cristina". Y que luego hay un sector peronista, no kirchnerista, donde "están (Juan Manuel) Urtubey, (Miguel) Pichetto y (Sergio) Massa, quienes para tener éxito deben recrear un espacio y establecer reglas entre ellos".
Asimismo, recordó que se retiró del PJ cuando (el ex presidente) Néstor Kirchner "copó" el partido. "Fuimos víctimas y parte de las rupturas de los partidos", puntualizó, a la vez que agregó: "Puedo decir que no tengo un día de kirchnerista. Pensaba que Néstor Kirchner y su señora nos iban a llevar al abismo suavemente, y así fue. Dejaron un país destruido".
En esa dirección, el senador opinó que la economía argentina, después de más de una década de gobiernos kirchneristas, quedó como si el país hubiese atravesado una guerra. "Hay que tratar de recuperar una conducta argentina de vivir de acuerdo a nuestras posibilidades, sin vivir de prestado o a lo grande, con lo que nos dé el cuero", enfatizó.
Por otro lado, marcó como un tropiezo de Macri el no haber llamado al consenso al asumir en 2015. Consideró que "el optimismo le ganó", por sobre el reconocimiento de la realidad que recibía. "El Gobierno no quiso esa concertación con los trabajadores organizados, con los bloques legislativos, con las fuerzas políticas y los sectores de la producción, con una visión federal, escuchando a los economistas; es decir, un diálogo político en sentido amplio”.
Agrego: “Se perdió una oportunidad. Hoy es un poco tarde con las elecciones a un año. ¿El porqué no se hizo? Algunos de ellos están influenciados por la 'nueva política'; dicen que no quieren acuerdos, que no se juntan con la 'vieja política'; esa pureza los dejó solos".