La iniciativa busca posibilitar a los padres acceder a licencias especiales, de hasta cincuenta y seis (56) horas en el año, para poder colaborar con la asistencia médica o terapia de rehabilitación de hijos con discapacidad.
Para ello se propone incorporar al artículo 158, Capítulo 11 sobre "Régimen de las Licencias Especiales", en el Título V de la Ley de Contrato de Trabajo N°20.744, un inciso “F”, que garantiza la licencia especial por asistencia médica y/o terapia de rehabilitación de hijo menor con discapacidad o mayor de edad en condición de dependencia, por el término de cincuenta y seis (56) horas alternadas o consecutivas en el año calendario.
“Este proyecto tiene razón de ser en la necesidad de contemplar la situación de las personas con capacidades especiales que necesitan del apoyo y la contención de su familia para optimizar su tratamiento y recuperación”, sostiene Zottos en los fundamentos del proyecto.
Agrega que “estas medidas de asistencia médica en general comprenden las que sean necesaria para el tratamiento o recuperación que hacen al bienestar de la persona afectada por una enfermedad incapacitante, donde la presencia de los padres para el menor o el mayor dependiente, resulta indelegable y sumamente beneficiosa”.
Y aclara que tanto las leyes 24.314 y 25.635, sobre discapacidad, como la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad y nuestra Constitución Nacional , señalan que "la familia es la unidad colectiva natural y fundamental de la sociedad y tiene derecho a recibir protección de ésta y del Estado, y que las personas con discapacidad y sus familiares deben recibir la protección y la asistencia necesarias para poder gozar de sus derechos plenamente y en igualdad de condiciones",
El poder contar con el acompañamiento y asistencia familiar en las terapias de rehabilitación es un derecho que se debe garantizar tanto a los padres como a los hijos; en consecuencia es nuestro deber garantizar los derechos de las personas con discapacidad porque así lo disponen la legislación interna y los tratados internacionales con jerarquía constitucional”, concluyó Zottos.