La jueza unificó la pena con una condena anterior impuesta por el Juzgado de Garantías de Octava Nominación en la pena única de cinco años de prisión efectiva, y ordenó que S. A. A. permanezca alojado en la Unidad Carcelaria 1.
La magistrada dispuso además la extracción de material genético del imputado por parte del Servicio de Biología Molecular del Departamento Técnico del Cuerpo de Investigaciones Fiscales (CIF), previa asignación del Dato único de Identificación Genética (DUIG), para su incorporación en el Banco de Datos Genéticos.
El imputado es padre de la víctima. La denuncia fue presentada el 15 de octubre de 2015 por la tía de la menor. La mujer fue citada por los directivos de la escuela adonde concurría la niña cuando ésta le contó a su maestra, a la vicedirectora y a la psicopedagoga de la institución que había sido víctima de abuso por parte de su padre.
La niña de 11 años contó que el 9 de octubre de 2015, por la tarde, estaba jugando con unos amiguitos en su cuadra, en el Asentamiento Nueva Esperanza, cuando su padre la llamó exigiéndole que ingresara a la vivienda. Cuando entró, la retó, la arrojó a la cama e intentó abusar de ella. La menor comenzó a gritar y una amiguita corrió a ver qué pasaba. Cuando la vecina entró a la vivienda, el imputado se subió el pantalón y salió corriendo. Antes de irse amenazó a su hija diciéndole que iba a matar a su madre si contaba lo sucedido.