La detención e imputación de Zerpa fue dispuesta por el fiscal penal 3, de la Unidad de Grave Atentados contra las Personas, Rodrigo González Miralpeix, quien se encuentra a cargo del caso, el que surgió a partir de un pedido de intervención procedente del Hospital Materno Infantil.
Según lo informado desde la fiscalía, la menor de 4 años, llegó a la sala de urgencias del hospital junto a su madre, quien reveló que la niña se había caído cuando jugaba en una pileta de lona de grandes dimensiones, la cual se hallaba vacía.
Debido a la gravedad de las lesiones que presentaba, en especial en el estómago, los médicos la asistieron de inmediato. La menor, según lo informado por el médico, Walter Marcelo Alvarez responsable interino de la Unidad de Gestión de Terapia Intensiva, la menor ingresó en un estado de salud “desesperante”.
En vista de la gravedad de las lesiones, la niña fue derivada a la sala de Terapia Intensiva donde fue intervenida y permanece internada. Al revisar la historia clínica, los médicos advirtieron que las lesiones detectadas, entre ellas perforación del estómago, no coincidía con la mecánica del supuesto accidente que la madre adujo.
Además, los doctores encontraron en un examen general otros rastros de posibles lesiones de larga data, por lo que ante la posibilidad de que la menor haya sido víctima de maltrato, dieron aviso a las autoridades judiciales.
Respecto a lo ocurrido la madre de la menor, al prestar declaración, reiteró que su hija se había golpeado al caer del borde de la pileta, no obstante, también dejó entrever que podría haber sido víctima de golpes propinados por otra hija, de 7 años, la cual padece una discapacidad mental.
Ante este relato, el cual dejó varias dudas, el fiscal solicitó que la hermana, de 7 años, sea sometida a una Cámara Gesell, circunstancias en la cual la menor fue contundente y reveló que fue su padrastro, Zerpa, quien le había pegado a su hermanita de 4 años.
La testigo indicó que todo fue porque su hermana no quería comer, lo que habría enojado a Zerpa. Dijo que el acusado le asestó golpes de puño en el estómago y la dejó tirada en la pileta, entre otros detalles aportados.
Asimismo, la testigo sostuvo que, tanto su hermana como ella misma, eran víctimas de golpes propinados por Zerpa. En vista de ello y de otras pruebas, entre ellas reportes médicos que sustentan los dichos de la menores, el fiscal solicitó la detención de Zerpa.
Graves lesiones
Respecto a la víctima, el médico legal, Juan Albornoz, señaló en un informe que la menor de 4 años presenta “esquimosis en miembros inferiores, región posterio torax, región frontal parte derecha de diferente data. Perforación de estómago en cara anterior y hematoma en meseterio”. En este reporte, el médico dejó sentado que la menor “sí corrió riesgo de vida”.
“De los hechos y circunstancias se tiene que el causante profirió diversos golpes a la menor víctima (de 4 años), en diversas zonas del cuerpo y en particular en el estómago de la misma dejándole una herida de gravedad interna, por la que debió ser intervenida quirúrgicamente de urgencia, provocándole una incapacidad estimada por el médico legal de 90 días, lo que la pone en riesgo de vida”.
Por otra parte, el fiscal explicó que el imputado “también profirió golpes a la hermana de la menor, lesiones que no representarían gravedad ya que son leves. La conducta desplegada por el imputado es altamente reprochable debido a su desinterés en el resultado, encontrando encuadre legal en el delito de homicidio simple, en grado de tentativa y lesiones leves”.
Tras la imputación, Zerpa, asistido por su defensor, prestó declaración indagatoria en la cual negó la acusación. Dijo que no se hallaba en la vivienda y reiteró que todo sucedió como lo había explicado la madre de las menores.
No obstante, el fiscal solicitó que se mantenga la detención de Zerpa, como así también solicitó una serie de diligencias en busca de profundizar lo ocurrido, tanto a la menor de 4 años, como a su hermana y determinar si hay otros responsables del hecho.