l caso se inició a partir de datos aportados a través de una denuncia web, mediante la cual se alertó sobre el accionar de dos sujetos que manejaban un carro de venta fruta y verdura, apostado en calles Caseros y 20 de Febrero, en pleno centro de la ciudad.
Con estos datos, según lo informado por la Unidad Fiscal de Narcocriminalidad, los policías llevaron adelante una minuciosa investigación en el lugar. Al respecto, el fiscal Gustavo Torres Rubelt, resaltó la tarea de los investigadores de la unidad, “hicieron una tarea impecable”, señaló.
Los efectivos, de manera discreta, se apostaron en la esquina de Caseros y 20 de Febrero, donde luego de un paciente seguimiento advirtieron que algunos clientes se acercaban y se retiraban con una sola naranja en la bolsa, por lo que al focalizar la pesquisa pudieron reconocer la maniobra.
“La misma consistía en la venta de envoltorios, ya sea de cocaína o marihuana, droga que los carreros guardaban en un bolso pequeño, debajo de la bandeja principal de exposición de la fruta que tenían a la venta al público”, explicó el fiscal.
Los investigadores, al seguir los movimientos de los acusados, pudieron establecer que cada vez que aparecía un cliente que buscaba droga, uno de los carreros buscaba la mercancía dentro del bolso, la introducía en una bolsa de plástico, luego metía una naranja y se la daba al comprador.
Para confirmar la venta, los policías realizaron el seguimiento de algunos de los clientes, quienes a las pocas cuadras, extraían la droga y la consumían. Para mayor seguridad, los investigadores detuvieron a algunos de los compradores, a quienes se les secuestro la droga adquirida.
También se pudo advertir que los carreros solían realizar la venta de drogas en dos puestos, uno en Caseros y 20 de Febrero y el otro en España y Balcarce. Al seguir al dueño del carro, los policías pudieron establecer que el mismo, tras guardar el puesto en una playa de calle Alvarado al 1.000, se dirigía a su casa en un automóvil Renault 12.
La misma se encuentra ubicada en barrio San Benito, y se trata de una edificación de dos plantas. El principal acusado, identificado como Nelson Toconas, de 37 años, tenía como rutina diaria la de salir de su vivienda rumbo al Mercado COFRUTHOS, donde adquiría la oferta del día, por lo general naranja o banana, la que luego vendía a modo de fachada.
Reunidas numerosas pruebas, incluso filmaciones de la venta de droga, se procedió a la detención de Toconas y su ayudante, Fortunato Geria de 37 años y domiciliado en barrio Círculo II. Ambos fueron arrestados cuando atendían su carro de venta,oportunidad en que se le secuestró más de 30 envoltorios con droga, como así también una importante cantidad de dinero y celulares.
Tras las detenciones, el fiscal imputó a los acusados el delito de “tenencia de estupefacientes con fines de comercialización” y dispuso que el caso sea tramitado como un caso sumarísimo, en vista de que los acusados fueron detenidos en “flagrancia”.