Entre una de las 14 medidas probatorias dispuestas por los fiscales penales, Pablo Cabot, de Tartagal, y Federico Obeid, de la Unidad de Delitos contra la Integridad Sexual (UDIS), quienes tienen a cargo la investigación, se había solicitado una autopsia del bebé, cuya gestación debió ser interrumpida.
La diligencia fue requerida en busca de establecer el período gestacional,dato de relevancia a fin de poder determinar si es coincidente con el abuso denunciado. Asimismo, se había solicitado, de manera complementaria, conocer la causa del deceso del bebé.
Esta pericia se inició el viernes pasado, y en los últimos días, los peritos del CIF remitieron un informe sobre los resultados a los fiscales. Quedó pendiente, en tanto, otra pericia que se lleva adelante el gabinete de inspección ocular y rastros del departamento de criminalística del CIF y que consiste en la recolección de muestras u otras pistas de una prenda de vestir de la menor abusada.
Sobre el resultado de esta prueba, los fiscales se mostraron cautos y no revelaron detalles sobre el informe recibido. Por otra parte, ya se realizó en Tartagal la extracción de muestra al tercer menor imputado, quien se hallaba ausente y se presentó a fines de la semana pasada.
Esta medida consiste en la toma de muestras de saliva (hisopado bucal), la cual se espera sea remitida ahora a los laboratorios del CIF a fin de comenzar posteriormente los cotejos genéticos con el ADN extraído del cordón umbilical del bebé gestado por la víctima.
También se encuentra en curso una pericia psicológica a la menor, quien permanece en la localidad de Alto La Sierra, como así también está pendiente una ampliación testimonial por circuito cerrado de TV de una testigo del abuso, diligencia que también se realizará en el norte de la provincia.