L. A. C. fue juzgado en un procedimiento abreviado presidido por el juez Roberto Faustino Lezcano, vocal de la Sala IV del Tribunal de Juicio. Resultó autor material y penalmente responsable de los delitos de abuso sexual gravemente ultrajante por su duración y circunstancias de su realización agravado por la guarda y la convivencia, y abuso sexual con acceso carnal agravado por la guarda y la convivencia.
La madre de la menor radicó la denuncia en contra de su cuñado cuando su hija le contó que L. A. C. había abusado de ella en reiteradas oportunidades. Las agresiones comenzaron cuando el imputado, su esposa y sus hijos convivían en el mismo inmueble que la menor y su familia. Luego, continuaron en el nuevo domicilio del acusado, cuando la niña se quedaba a dormir allí con sus primos.
El juez ordenó que L. A. C. sea trasladado a la Unidad Carcelaria 1 y recomendó a las autoridades del Servicio Penitenciario que realice tratamiento psicoterapéutico por la naturaleza de los hechos por los cuales resultó condenado.