La iniciativa unificó las propuestas realizadas por ediles de distintas bancadas. En virtud de la presentación realizada por el concejal Gastón Galíndez (PJ) se establece la ampliación del programa “Separemos Juntos”, por su parte, la realizada por el edil Matías Cánepa (Por Salta), modifica el régimen de multas establecido en la Ordenanza mencionada y, a instancias de la concejal Virginia Cornejo (PRO), se incorpora el programa “Una Salta limpia es posible, cuidémosla juntos”.
Durante el tratamiento, Galíndez (PJ) consignó: “el desafío es avanzar en una cambio cultural. Es necesario que quien genera la basura sepa que es el dueño y que debe colaborar con la disposición final mediante la clasificación en origen, la que se implementará progresivamente en la ciudad mediante esta iniciativa”. Consideró además que “los residuos tiene un valor monetario que puede ser comercializado por parte de las cooperativas, generando ganancias para los trabajadores, sumándose a los beneficios ambientales que significa el reciclado”.
En referencia a la implementación de la separación en origen y recolección selectiva, la normativa fija su implementación en todo el territorio del ejido urbano municipal en un período de tres años. Con ese objetivo el DEM proveerá bolsas diferenciadas por color y evaluará la forma más conveniente de realizar la recolección selectiva, para lo cual podrá disponer contenedores o recipientes apropiados. En este marco se dispuso también incorporar a la clasificación de basura ya existente, la de los residuos secos, entendiéndose como tales al papel, cartón, plásticos, metales ferrosos y no ferrosos y vidrios. Además, se deberá garantizar las acciones y recursos necesarios a fin de dotar de infraestructura para el trabajo de las cooperativas y recuperadores de residuos sólidos urbanos. Por último, se capacitará a los habitantes de la ciudad de Salta sobre la disposición final de los residuos sólidos urbanos, estableciendo un régimen de incentivos para aquellos habitantes de la ciudad de Salta que cumplan con la separación en origen.
Buscando promover una mayor limpieza en la ciudad, se incorporó también la clasificación de la basura de los residuos de origen vegetal. Los que se definen como aquellos productos resultantes del corte de césped, la poda domiciliaria y de espacios verdes, tales como ramas y troncos podados o derribados. Se suma además la recolección de residuos de origen vegetal, la que comprende los restos verdes originados por limpieza de espacios verdes públicos y privados.
Mediante la modificación a otros artículos, se fijan modificaciones a las sanciones por infracción. Se establecen nueve categorías, fijando multas que oscilan entre las 50 y las 400 Unidades Tributarias. Entre las acciones penalizadas se encuentran el acopio de residuos en recipientes no reglamentarios, esparcir o acumular en la calzada los residuos resultantes de la limpieza de veredas, no solicitar el retiro de animales muertos, acopiar basuras en el interior de los inmuebles, colocar restos de poda en días no establecidos para su recolección, etc.
Por último, la iniciativa sancionada incorpora cambios en el artículo 134 fijando que será de aplicación supletoria lo que al respecto pudiere establecer la Ordenanza Tributaria Anual vigente.
La concejal Virginia Cornejo (PRO) tomó también la palabra para señalar el largo trabajo que significó la unificación y consenso de los temas incluidos en la Ordenanza, buscando alcanzar una normativa que se adecue a los nuevos tiempo.
Por su parte, el concejal José Britos (PO) manifestó que “la aprobación de las modificaciones significan un avance para la disposición final de la basura”. Consignó además que “es importante poder avanzar con el tratamiento diferenciado de los residuos e incorporar de manera gradual la recolección selectiva y la separación en origen, mediante campañas de concientización a la sociedad”.