En ese sentido, el magistrado dejó sin efecto la medida cautelar de no innovar dictada en la causa.
Por último, exhortó a las autoridades eclesiásticas y al personal técnico a sus órdenes, llevar a cabo la demolición de la Iglesia en cuestión ejecutando la obra de forma responsable y adecuada a las normativas de higiene y seguridad vigentes.
La iglesia había resultado con serios daños luego del sismo de octubre del 2015.