Las modificaciones introducidas prohíben la entrega de bolsas plásticas de cualquier característica en la línea de cajas, debiendo ofrecer a los consumidores elementos alternativos sin costo alguno. Fija las sanciones en caso de incumplimiento y la necesidad de realizar campañas de concientización para reducir el uso de estas bolsas.
Sobre el nuevo articulado, Villamayor explicó: “permitirá poner fin al cobro de las bolsas por parte de los supermercados, además determina los sujetos que quedarán comprendidos en la norma”. También destacó que “la aplicación de la normativa ya existente permitió reducir en un 70% la entrega de bolsas en línea de caja, lo que significó pasar de 500 mil bolsas por mes a sólo 150 mil”.
La normativa sancionada en la fecha modifica el artículo 1° de la Ordenanza N° 13.553, fijando la prohibición de la entrega de bolsas plásticas de cualquier característica en la línea de cajas para el transporte de la mercadería adquirida por los clientes en los locales denominados y clasificados como supermercados, hipermercados y comercios mayoristas.
La iniciativa fija además que los locales mencionados deberán ofrecer a los consumidores elementos alternativos, que en el caso de las bolsas plásticas deberán cumplir con la norma IRAM N° 13610, las que contemplarán la reutilización y la alta degradabilidad, sin costo alguno para los consumidores.
La Ordenanza, también determina cambios en el artículo 5º de la normativa de referencia, estableciendo que la primera sanción por incumplimiento será una multa entre un mínimo de mil Unidades Tributarias y hasta un máximo de cinco mil. Así como la clausura o inhabilitación en caso de reincidencia, y el decomiso de las bolsas o bienes muebles que fueran objeto de la contravención.
En otros artículos se solicita al DEM realizar campañas de concientización y establecer un sistema de disposición final de los residuos sólidos para el posterior tratamiento de degradación de las bolsas plásticas.
En su alocución, la concejal Villamayor se refirió al cobro de bolsas plásticas, sosteniendo: “esta actitud excesiva y abusiva realizada por los supermercados e hipermercados provocó una denuncia en la Defensoría del Consumidor de la provincia y con esta iniciativa queremos ponerle fin a ese mecanismo”.
El concejal Gastón Galíndez (PJ), por su parte, consideró la importancia de las políticas para el cuidado del medio ambiente. afirmando: “debemos pensar en una gestión integral, incorporando en un futuro una norma para el tratamiento de los residuos domiciliaros orgánicos e inorgánicos”. Por último hizo mención al estudio realizado por la Ingeniera Norma Plaza de la Universidad Nacional de Salta, en referencia al ciclo de vida de las bolsas plásticas y el impacto ambiental de las mismas en la provincia.
Ángela Di Bez (Primero Salta) también se refirió a la iniciativa, afirmando: “el único futuro de este producto es el reciclado y si no se separa en origen no hay vertedero que pueda ser sustentable, por eso creo importante que las bolsas entregadas en línea de caja deban estar reguladas por la norma IRAM Nº 13.610, para que puedan ser reutilizadas para el desecho de residuos”.
El concejal José Britos (PO), por su parte, introdujo modificaciones a la normativa sosteniendo: “se debe dejar establecido que las bolsas que se consideren como elemento alternativo tienen que contar con características para su reutilización y ser entregadas sin costo para el cliente”.