Ante un templo colmado de fieles, Zanchetta ofició la misa estacional dedicada a la fiesta de la exaltación de la cruz y en su homilía reconoció el esfuerzo de los peregrinos por llegar a Dios y a la Virgen, salvando distancias y dificultades. Dijo además que la exaltación de la cruz es una fiesta antigua que "venera al Señor entregando la vida por nosotros".
También estuvieron encabezando la celebración el arzobispo de Salta, monseñor Mario Antonio Cargnello y su par de Iguazú, Marcelo Martorell.
Por su parte, en declaraciones posteriores a la celebración, el Gobernador Urtubey destacó la llegada de miles de peregrinos de distintas partes de La provincia y el país que son los verdaderos protagonistas de este milagro salteño.
"Esto es lo que es Salta, lo que significa para nosotros este tiempo de milagro. Un pueblo de mucha fe y de esperanza que puede transformar este sacrificio en esperanza para el futuro", sostuvo Urtubey.