En el hospital Arturo Oñativia se inauguró la nueva guardia externa para la atención de emergencias en pacientes con patologías renales y endocrinometabólicas, como por ejemplo, problema de tiroides, diabetes, obesidad, entre otras.

Este servicio está equipado con ocho camas, tres sillones para diálisis, oxígeno central, desfibriladores, una estación para enfermería, sala de médicos y baños.

A diario son asistidos alrededor de 50 pacientes con este tipo de enfermedades. De ellos, el 80% reside en la ciudad de Salta y el 20% en el interior provincial.

El ministro de Salud Pública, Federico Mangione, dijo que “esta obra amplía la capacidad de atención, ofreciendo un espacio moderno, más confortable y de mayor calidad para los pacientes y el personal que allí se desempeña”.

Agregó que, “desde el Gobierno de la Provincia seguimos invirtiendo e inaugurando obras en hospitales y centros de salud, porque apostamos a mejorar la calidad del sistema sanitario público, con criterio federal, en los 60 municipios de la provincia, tal como nos pide el gobernador Sáenz”.

Por su parte, el gerente general del hospital Arturo Oñativia, Marcelo Nallar, expresó que “estamos en el tramo final de un plan estratégico en el que venimos trabajando hace un tiempo. Cuando se fundó nuestra institución no fue planificada la guardia ni la terapia intensiva. En esta gestión de Gobierno lo diseñamos y lo hicimos realidad, estamos muy contentos de poder ofrecerle a los pacientes una guardia moderna, tecnológica y con un recurso humano altamente capacitado”.  

También, Nallar agradeció a quienes colaboraron con esta refuncionalización. “Hubiera sido imposible sin la ayuda del Gobierno, del ministro Mangione, de nuestra cooperadora y de los padrinos del hospital -que son empresarios salteños- quienes nos colaboran siempre”.

El funcionamiento de la guardia requiere el trabajo de personal administrativo, enfermería y médicos especialistas, los cuales se complementan con otros sectores del hospital, brindando una atención integral al paciente. 

La obra fue edificada sobre una superficie de 240 metros cuadrados, con una inversión superior a los $20 millones de pesos, financiados con fondos de la cartera sanitaria, del nosocomio y de la Cooperadora del hospital.