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SALTA

Energía atómica

Quieren desarrollar investigaciones en la Puna

El gobernador Juan Manuel Urtubey recibió a investigadores del proyecto de astronomía denominado QUBIK, interesados en instalar en Salta equipos de alta tecnología para la detección de un tipo particular de energía atómica que se encuentra en fase experimental a nivel mundial.

Optaron por la Puna en lugar de la Antartida
Optaron por la Puna en lugar de la Antartida

Los investigadores Jean Christophe Hamilton, de Francia, y Alberto Etchegoyen, de la Comisión Nacional de Energía Atómica de Argentina, interiorizaron al Gobernador sobre los alcances del proyecto que se analiza instalar en Alto de Chorrillos, a 15 kilómetros de San Antonio de los Cobres, con el equipamiento necesario para la detección de energía.

Urtubey expresó su interés por lo innovador del estudio desarrollado y manifestó el apoyo del Gobierno provincial para llevarlo adelante.

En principio, se consideró instalar el proyecto en la Antártida ya que allí las condiciones del cielo son ideales; pero luego se optó por la Puna salteña porque también cuenta con excelentes condiciones de cielo, se accede con mayor facilidad y cuenta con condiciones de infraestructura.

En el encuentro participaron la ministra de Educación, Ciencia y Tecnología de la Provincia, Analía Berruezo; la secretaria de Ciencia y Tecnología, Soledad Vicente; el agregado cultural de la Embajada de Francia, Etienne Suar;  el directivo de Relaciones Institucionales de la Comisión Nacional de Energía Atómica, Juan Ferrer; además de investigadores que conforman el proyecto QUBIK.

QUBIC surge de una colaboración franco-italiana, con contribuciones de científicos ingleses, irlandeses y ahora también argentinos. El proyecto se plantea en principio en cinco etapas, con un costo total estimado de 50 millones de euros, aportados por los Gobiernos de Francia e Italia, principalmente.

Es un tema de sumo interés científico a nivel mundial y los países más desarrollados, en particular Estados Unidos, están abocados en forma casi exclusiva a encontrar la manera de medir este nuevo tipo de energía. El primer grupo que pueda detectarlo sería merecedor de un gran mérito científico, ya que se comprobaría de manera experimental algo que hasta ahora está planteado sólo en forma teórica.

 

 



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